Después de cantos regocijados en la impertinencia del tiempo
comprendo fehacientemente el dolor aberrante
de la verdad absoluta
Imperante.
Aferrables sentimientos de amor corresponden
en sanguinolentas noches de soledad
ofuscada
Impertinentes suenan las voces de quienes no han vivido
Solo el sueño de quien todo lo perdió suena como eco profundo
en la mente de quien nada nunca tuvo
y recuerda
como llegó hasta la vida tal final oscuro
Como hay vida tras un velo de sangre y dolor
como hay muerte entre tanta soledad
intolerantes sonidos atraídos por el dolor
recuerdan el momento eterno, en que el valor fue perdido
aterradoras imagenes de un futuro previsible
comprenden el dolor
amenizan la existencia
solemnizan el momento
y quien soy yo para juzgar
a quien yo solo he conocido
y quien solo me ha amado
no me conozco
mirar al espejo en búsqueda de trazos rotos
y encontrar en cambio,
mundos muertos
Recuerdame un momento
que tras de ti va mi ayuda
puedo yo ya lo he sufrido
y no quiero que tu sufras
Me desangro
y tras mi no va ayuda
ni consuelo
Me sostengo
durante noches de mil horas
y coexistencias aberrantes